Ciudad de México a 29 de abril de 2020 Comunicado de Prensa No. 16
L@S PEQUEÑOS Y MEDIANOS PRODUCTORES ESENCIALES PARA ALIMENTAR A MÉXICO
– Se requiere impulsar modelos de producción de agricultura sustentable, agroecológica y orgánica. – Ante la emergencia sanitaria y económica es necesario seguir construyendo un nuevo modelo agroalimentario y nutricional.
1. La Organización de las Naciones Unidas (ONU), de acuerdo a diversas publicaciones de prensa, ha declarado, que paralelo con la emergencia sanitaria provocada por el COVID-19, el mundo podría entrar también en, “una pandemia alimentaria”.
2. En este contexto la producción de alimentos al igual que el comercio se han visto impactados por la pandemia del COVID-19 (se han causado fluctuaciones de precios y se han impactado las cadenas cortas de suministros) y se podría desencadenar, se advierte, “una crisis alimentaria”. Esta pandemia ha mostrado la vulnerabilidad del mercado y el porque la agricultura pequeña y mediana es la base de la soberanía alimentaria.
3. En México la pequeña y mediana agricultura alcanza más del 70 por ciento de las unidades de producción, de donde se obtiene la mayor parte de los productos básicos que consume el pueblo de México; asimismo, producen más del 50 por ciento de la producción de alimentos (básicos y estratégicos) y más del 50 por ciento de la producción ganadera; además de que se están preparando para mantener un buen ritmo en la producción de alimentos en este 2020 y en los siguientes años. Es en el trabajo de las familias campesinas donde radica la estabilidad y alimentación de las ciudades. Hoy más que nunca se puede apreciar el aporte de la unidades de producción de pequeña y mediana escala.
4. Ante las emergencias sanitarias y económicas es indispensable reconocer el papel central y esencial de las y los pequeños productores del campo en la producción de alimentos sanos, frescos, nutritivos e inocuos, como garantes de la biodiversidad y una relación respetuosa con el medio ambiente. Sin ellos, es imposible pensar en lograr el objetivo de alcanzar la autosuficiencia y soberanía alimentaria. El COVID-19 evidencia el acierto de confiar la producción de alimentos en manos campesinas y no depender de las importaciones agroalimentarias.
5. Los programas productivos y sociales del gobierno de la Cuarta Transformación (4T) están fortaleciendo otras formas de producción sustentable, como la agroecológica y orgánica, en consonancia con la constitución mexicana, en relación a la producción de alimentos sanos, inocuos y nutritivos; éstos constituyen una parte fundamental de la producción de alimentos en estas emergencias. Por ello, impulsar la producción local de alimentos es preciso para una auténtica transformación. Hoy la revolución no será con cuarteles, aduanas, ni bases militares, sino con campesinas y campesinos, con agroecología, granjas, huertos, escuelas y hospitales.
6. Rumbo al cumplimiento de los objetivos establecidos en el gobierno de la 4T y el Plan Nacional de Desarrollo de producir los alimentos que el campo y la ciudad requieren; es imprescindible redoblar esfuerzos de todos los actores rurales, tanto del ejecutivo, las dependencias del sector, las y los pequeños productores en lo individual y organizados; hacer todo lo que se encuentre en sus manos para una mejor eficiencia en el manejo de los recursos; superar las limitaciones y mejorar los instrumentos (transparentar los padrones de beneficiarios, mejorar la operación de los programas prioritarios y atender a los productores más pobres). Supervisar y penalizar la especulación, sobre todo de bienes de la canasta básica, para garantizar la autosuficiencia y la soberanía alimentaria. Solo el pueblo defiende al pueblo y hoy en la producción de alimentos será más evidente, asimismo debe darse una mayor fortaleza a la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) para evitar la especulación, alza de precios de los productos básicos y garantizar el derecho de los consumidores.
7. De igual manera es imprescindible fortalecer la política pública para el campo, haciendo énfasis en los programas de fomento productivo para los productos de la canasta básica, para que en consonancia con las medidas expuestas por el Ejecutivo el día 22 de abril, contribuyamos al fortalecimiento del mercado interno y prioricemos la producción nacional y disminuyamos la importación de alimentos.
8. Establecer mecanismos que permitan desarrollar en las mejores condiciones posibles los apoyos, servicios y programas para los jornaleros agrícolas.
9. En la coyuntura por el COVID-19 y su impacto en la economía rural se hace necesario desarrollar algunas acciones que fortalezcan las actividades ciudadanas que fortalezcan la producción y comercialización de los alimentos; impulsar cadenas cortas de suministro, impulsar que SEGALMEX reciba maíces criollos, impulsar que la mano obra en los ejidos y comunidades, y priorizar el empleo, por ejemplo, en obras que las propias comunidades puedan llevar a cabo; favorecer las condiciones para el transporte de alimentos de la canasta básica y medicamentos; favorecer compromisos de pagos de servicios como los de energía eléctrica, agua, pagos como el predial etcétera y favorecer los esquemas de crédito que se han anunciando. Y también propiciar las condiciones para el establecimiento de huertos urbanos, bajo una estrategia de financiamiento y acompañamiento técnico para contribuir a la producción de alimentos sanos.
10. Hacemos un llamado URGENTE al secretario de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), Víctor Villalobos, así como a diputados y senadores para que atiendan nuestras propuestas y alternativas para aumentar la producción de alimentos y garantizar el bienestar de la gente del campo.
11. Finalmente, reiteramos nuestras propuestas anunciadas en los comunicados de prensa que recientemente hemos publicado. Más información: https://www.movimientocampesinoplandeayalasigloxxl.org.mx/